2/10/2024 «…sonreír por la muerte de Nasralá –no tengo conflicto en admitir que fue mi caso– no equivale a aplaudir la detonación de los miles de aparatos que, en Líbano y Siria, provocaron en la población civil el mismo efecto de un atentado terrorista “convencional”. Eso es más para el oportunismo político, que tiene las seguridades de un adolescente y una baja disposición a preocuparse por significados o consecuencias a mediano y largo plazo.» Dar click en el texto para seguir leyendo. Twittear