2/5/2024 «Estamos ahí, entre la mezquindad de los diminutos con su inmensa facilidad para la hipocresía. Encallamos en su isla y nos adueñamos de su tradición: el baile por medio del cual se escalan posiciones de poder. Sumergidos en el entendimiento político de los liliputenses, aquí quien salta la soga sube de posiciones y no hay mejor ejemplo de este espectáculo como nuestras elecciones. Exhibición de esa extraña cualidad de piel gruesa y vocación por la autohumillación en quien cambia de adherencia o principios para seguir jugando, porque el juego no es la política que debería ser sino mantenerse entre sus instrumentos como si el ejercicio de lo público se tratara de mantener la cabeza pegada al cuello.» Dar click en el texto para seguir leyendo. Twittear