24/2/2022 «No es nueva la obsesión de toda política burda con la extranjería. Está en los pretextos recurrentes de salvaguarda al identitarismo mexicano. Lo foráneo se transforma en insulto donde la extranjería es sospecha. Recurso xenófobo, afín a teorías capaces de eludir responsabilidades en un continente donde los fantasmas de un triste pasado son exaltados para justificar la ineptitud del presente.» Dar click en el texto para seguir leyendo. Twittear