21/10/2021 «Alguna vez escribí sobre la necesidad de incorporar el delirio al leguaje político mexicano, solo que incluso el delirio tiene un tergiversado piso de supuesta realidad. En cambio, el charlatán no depende de nada si acaso su estulticia, la facilidad del engaño y falta de sentido crítico.» Dar click en el texto para seguir leyendo. Twittear